

¿Todavía no conoces este tesoro de la cultura japonesa cultivado por Acemelia en nuestra querida Galicia? Déjanos decirte algo: si es así, te estás perdiendo uno de los ingredientes imprescindibles del perfecto autocuidado. Ese de verdad, el más profundo y sencillo autocuidado. Cutis, cuerpo y cabello hidratados y nutridos hasta las capas más profundas gracias a las características de este aceite natural de excelente calidad. Sí, certificada, por supuesto. Vamos, estamos seguras de que deseas saber más sobre nuestro Aceite de Camelia Acemelia, así que… ¡Sigue leyendo!
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¿Por qué consideramos el Aceite de Camelia Acemelia tan especial?
Pues verás, para contarte ese porqué, necesitamos un poquito de historia… Tradicionalmente, este tipo de aceite natural se extrae por prensado en frío de las semillas de la Camelia Japónica. Esta planta se da en muy pocos lugares del mundo: digamos que es bastante tiquismiquis con las condiciones climáticas que necesita y su crecimiento se limita a zonas tropicales y subtropicales de China, Japón…
No obstante, resulta que nosotros también tenemos un rinconcito idóneo por sus temperaturas suaves e incesantes lluvias: nuestra tierriña, Galicia.
Y Acemelia ha querido aprovechar ese privilegio. Esta marca que tanto nos enamora por su filosofía, nos propone el mejor cuidado de nuestra piel y cabello: el ritual SAHO, un ritual de belleza utilizado por las Geishas en Japón desde tiempos ancestrales, en las que este aceite es una parte imprescindible y el secreto de sus cutis de porcelana y cabellos sanos y brillantes.
La clave: adquirir una forma de cuidar piel y cabello de manera simple, paciente, en armonía con la naturaleza. Huyendo de las prisas, de los activos artificiales poco interesantes para tu bienestar. Mimando tu cuerpo, aceptándolo, nutriéndolo desde lo más profundo.
Extrayéndolo mediante un proceso lento y cuidadoso, Acemelia cuida que cada parte del mismo sea artesanal, respetuosa con el medio ambiente y con el propio producto. El resultado, calidad en su estado más puro y natural.
Si su eficacia se debe a algo es a su concentración tan alta en aceites esenciales, en especial, ácido oleico (85%), los cuales aportan los nutrientes específicos para que nuestra piel mantenga su capacidad de retener la humedad.
Si no cuenta con esta ayuda, los años y los daños externos consiguen que la piel se seque y nos deje ver los temidos signos de envejecimiento.
Añádela a tu rutina de cara y cuerpo y comprueba tú misma de lo que te hablamos. Recuerda que sea cual sea tu tipo de piel, incluso si es de las más sensibles, es ideal para ti.
El resultado, un pelo fuerte, nutrido, brillante y bonito… Lo que todas queremos, ¿verdad?
Recuerda, Aceite de Camelia, tu aliado para quererte, mimarte y cuidarte de la forma más simple y natural.
Pd: ¿No sabes cómo utilizarlo? Pregúntanos, ¡nosotras te informamos!